Si tuviera que decir la primera palabra que se me pasara por la mente en este mismo momento sería debilidad. Soy débil. Se ha acabado, SE ACABÓ, se ha olvidado de ti, nunca volverá a ser lo mismo… esas son frases que no logro comprender, no hay sitio para ellas en mí. NUNCA nada se puede acabar, no puedo dejar que nada se acabe, al menos no puedo hasta que yo esté preparada para que se termine. No puedo comprender que una relación se acabe de un día a otro, que un sentimiento que ha tardado años en formarse se pueda quedar reducido a nada con unas pocas palabras, que tú y yo nos estemos alejando… simplemente, no lo entiendo. Yo estoy dispuesta a dar un paso, ya no tengo miedo, recorramos este camino juntos, luchemos contra el viento y la marea. Vamos, da un paso a mi lado. Caminemos juntos. Si abandonamos ahora no habrá vuelta atrás.