Me equivoqué al creerle, pero también me equivoque cuando no quise hacerle caso. Fue un error haberle contado tantas cosas, pero peor no haberle dicho lo más importante.
 Te pierdo, pero fue mi error por confiarme demasiado o por no confiar lo suficiente. Razones siempre habrán de sobra. Que tu cambiaste, que yo no lo hice, que buscas algo mejor o que no soy lo que necesitas.
   Sobran lágrimas y canciones tristes. Noches llenas de razones para no olvidarte, reproches, mentiras y rencores.
   No recuerdo cuando comenzó todo a cambiar, cuando te empezaste a alejar. Sé que te quiero, que no he dejado de hacerlo, pero no sé que hacer para que lo veas, no sé si quiero saber que esto ya no te importa.