Te piensas que la vida es fácil, que tienes que dejar pasarla a tu alrededor y quedarte de brazos cruzados, que los problemas ya se resolverán solos sin que tú necesites hacer ni un mínimo esfuerzo. Pero si supieras la cura que conlleva la vida, canviarías totalmente de ideas. Lo que te pasa es que no te quieres dar cuenta que la vida no está hecha a tu medida, ni a la de nadie ni te quieres dar cuenta que es difícil y que tienes que hacerlo todo luchando, poquito a poco y con una delicadeza total para que las cosas no te salgan mal. Lo que te pasa es que no quieres darte cuenta que la vida te va dando porrazos y que vas en contra dirección del mundo y que cualquier día de estos te vas a dar cuenta de lo que en realidad es la vida, que no es un juego de muñecas como te piensas. Despierta, estamos en el mundo real.